Hola…
Cuando el mundo te deprima, observa lo que te rodea con objetividad. Avanza de manera positiva; no te dejes caer en una visión negativa. Mira las cosas tal y como son. No permitas que las trivialidades te distraigan.
Haz lo que puedas, como puedas, con los recursos que tienes a tu disposición. No menosprecies tus esfuerzos; cuentas con la fortaleza interior para cambiar lo que sea necesario. Enfréntate a la situación con la intención de remediarla; haz lo que necesites para resolverla y dejarla atrás.
Y recuerda que Dios siempre estará de tu lado…