En el colegio aprendí que la vida es dura, que el humilde nunca puede ganar gana la carrera la presencia y el lujo y el rotoso siempre quedan detrás, jamás tuve
amigos pues de mi se alejaban era una vergüenza conmigo charlar pero si
era honor humillar a una niña que por pobre y humilde salió a trabajar.
Las narices tapadas, la sonrisa en sus labios creyéndose listos me
hacían oír ¨hay olor a vaca quien será que lo tiene¨ y mirando a mi lado
me hacían sufrir, la revancha algún día llega y se que humillados me
verán pasar pero humilde y con gusto extenderé mi mano para saludar.
MUY BIEN TUS PALABRAS, QUE DELATAN LA INICUIDAD DE SERES SIN PIEDAD QUE DISFRUTAN HACIENDO DAÑO Y SIN ENBARGO LA NIÑA AGREDIDA LEVANTA SU MANO Y LES SALUDA CON AMOR..GRACIAS POR COMPARTIR.SALUDOS.CSIMIRO.