Las plantas elevan la autoestima, alivian la depresión, relajan y mejoran las funciones motoras, la concentración, la motivación, la tolerancia al trabajo y la destreza manual de quienes las manipulan. Alguien dijo por allí: “No hay mejor forma para preservar la salud que pasar el tiempo libre en el jardín
Las plantas nos aportan una energía muy especial; su belleza y frescura activan nuestro cerebro y estimulan la producción de serotonina. Visualmente, alegran los ambientes y cuidarlas y ayudarlas a crecer es un ejercicio muy gratificante que nos conecta siempre con la vida. De acuerdo con la antigua sabiduría china, las plantas transmiten diferentes energías según sus orígenes y los aromas que despiden.
El crisantemo, por ejemplo, representa la fortaleza. Para lograr un espacio de paz y armonía, es imprescindible un estanque con flores de loto. Los ciruelos son el símbolo de la primavera y aportan alegría y vitalidad mientras que el bambú es sinónimo de sabiduría y se asocia con una vida extensa.
Las plantas con más elementos yang, relacionados con la fortaleza, la energía, lo activo y lo expansivo son el bambú, el crisantemo, la peonía, el cerezo, la orquídea y el sauce. Las planta con más elementos ying, relacionados con características más tranquilas y frías son la magnolia, el rododendro, el jazmín, el peral y el rosal.
También el perfume de las flores tiene propiedades curativas, ya que favorece la circulación del chi, la energía vital. Cuanto más perfumada es una flor, más capacidad tiene de producir sensaciones de armonía en las personas. Entre las más apreciadas por sus aromas se encuentran la madreselva, la rosa, la lila, el loto, el jazmín, el lirio, el clavel y la glicina.
Cada flor tiene un símbolo y una propiedad beneficiosa: el rosal es considerado un buen conductor de las energías de la tierra y según algunas leyendas sus pétalos secos protegen contra las malas vibraciones.
La reina de las flores es la peonía, símbolo de la buena fortuna, la felicidad y la riqueza. El loto, la flor del verano, es considerada un símbolo de amistad, paz y unidad.
La selección de plantas en el hogar debe responder a un criterio lógico, estético y viable. Conociendo sus beneficios para la salud emocional y sus propiedades terapéuticas, y basándonos en el sentido común de acuerdo con el espacio disponible y nuestras preferencias personales podremos encontrar un lugar apropiado para que cada planta nos beneficie con su energía y belleza en cada rincón de nuestra casa.