La alegría de nuestros corazones Sonrisas de ángeles representada en niños, Nuestras almas abiertas están Para que el niño Dios nos toque Con la varita mágica del amor y la felicidad Dejemos nuestras tristezas y frustraciones Abrámosle la puerta al amigo ofendido a nuestro padre, nuestro hermano, o simplemente al vecino Que nuestro ser sea el reflejo de Paz y perdón Hagamos de nuestro hogar Un portal de Belén, donde Solo se sienta la presencia de Dios, y en nuestras oraciones Estén siempre presentes Aquellos seres humanos que No cuentan con un pan No solo para el cuerpo Sino también para el alma Navidad noche mágica de felicidad. d/a