Alabado sea Jesucristo…
La
aceleración y el cambio son dos constantes del mundo actual y piden
mucha flexibilidad y apertura. Muchos datos sirven para entenderlo y los
mejores están en el sorprendente espacio de la comunicación.
El
científico Isaac Asimov sintetiza en pocas palabras los avances
vertiginosos con esta anotación: “La reina Isabel la católica tardó
cinco meses en recibir noticias sobre el viaje de Cristóbal Colón…
Pasaron dos semanas para que en Europa se enteraran del asesinato de
Abraham Lincoln allá por 1865… Y el mundo tardó solamente un segundo
para saber que Neil Armstrong estaba pisando la luna en 1969”.
Ojo,
hoy el mundo vuela aún más rápido, y con él vuelan sus hijos, querido
padre de familia. Por eso esté alerta y comuníquese bien con ellos. Que
no lo deje el tren de la historia. (G. Gallo)
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día más
para adorarte y servirte. Hagamos como decía San Agustín:
Señor a Ti solo busco, a Ti solo amo y tuyo quiero ser. Mi
único deseo es conocerte y amarte. (Sol 1,1,). La mies es
mucha y pocos son los obreros para recogerla. Es la
Palabra de Dios. Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo siembro
cada día Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de que
se propague la Fe, en el Sagrado Corazón de Jesús y
suplico a todos los creyentes y no creyenes, que pidan al
Señor Jesucristo en oración, que no haya más guerras ni
hambre en el Mundo y reine la Paz en todos los rincones del
Orbe. Así sea. Detente, el Sagrado Corazón de Jesús está
conmigo. Casimiro López