“En cuatro o cinco días me voy del país. Tengo miedo”. Estas palabras pertenecen al comerciante de el barrio El Progreso de Villa Elisa, que fue asaltado dos veces en ocho días. Aunque no se ha vuelto a registrar otro robo en ese almacén, esos dos hechos dejaron una marca, que será difícil de olvidar.
El primero de los robos sucedió a fines de enero. Fue un martes, en “La Bodeguita de Emilio”, propiedad de Antonio Ariel Aguiar (57), ubicada en 424 y 13.
Ese día, el ladrón entró al negocio y, mientras pedía dinero, le gatilló a un cliente.
Luego, no conforme con la suma que las víctimas le habían entregado, volvió a sacar la pistola, le apuntó a un nene de dos años y accionó nuevamente el gatillo, pero la bala no salió. Ante semejante muestra de violencia, Antonio reaccionó, golpeando al ladrón hasta sacarle el arma y reducirlo. Casi una semana después, un robo similar se dio en el mismo lugar. Esta vez, el almacén era atendido por la pareja de Antonio.
El ladrón utilizó el mismo modus operandi: le gatilló a la mujer, para luego arrebatarle la recaudación del día.
“Tenemos miedo, no sabemos si nos van a matar. No dormimos, no es vida esto”, comentó Antonio en comunicación con este diario. “Varios vecinos de mi barrio fueron asaltados, un muy querido amigo mío fue apuñalado en La Plata... No nos cuidan, por eso nos queremos ir del país. Me dijeron que el ladrón que nos robó la primera vez ya está suelto”, agregó más tarde, con miedo profundo, palpable en su discurso.
Al parecer, el plan de Antonio es vender todo lo que posee y cruzar el Río de La Plata hacía la República Oriental del Uruguay. Por eso colocó un cartel en la puerta de su almacén que informa a la gente sobre su decisión.