Alabado sea Jesucristo…
Señor mío, encontrarme contigo es motivo siempre de sanación, de liberación, de descanso y, sobre todo, de volver a cargar energías para siempre estar listo cada día. Pienso mucho en la necesidad de ser paciente, sabes que no es algo que sólo dependa de mi voluntad, sino que necesito de tu acción poderosa, para que mi corazón sea capaz de vivir al ritmo del tuyo y así poder ir aceptando cada situación sin drama y con la conciencia de que siempre quieres para mí lo mejor. Te suplico que bendigas a todos los que amo y a los cuales, por distintas razones, he herido con mi comportamiento impaciente. Dame la posibilidad de no volverlo a hacer y de poder pedirle perdón a cada uno de ellos. Confío en tu poder y en tu misericordia que me van transformando. Amén.
* Píldoras de Fe
¡Buenos días!
Para sanar ansiedades
Los temores y las ansiedades pueden anular tus mejores energías y frustrar el logro de tus objetivos. Para liberarte de estos sentimientos negativos nada mejor que confiar en el Señor. Él te acompaña y está dispuesto a darte una mano. Basta que sepas dejarle el cuidado de todas tus cosas y abandonarte confiadamente en él. Te ayudará rezar esta oración.
Dios mío, mira mis nerviosismos, mi inquietud interior y pacifícame, Señor, calma mi corazón perturbado, derrama en él tu paz divina. No dejes que me llene de ansiedades y obsesiones, porque nada de este mundo vale tanto, nada es divino. Jesús, cura mi ansiedad con tu mirada paciente. Ayúdame a luchar con paz y gozo, caminando firme, sereno sin prisas. Quiero trabajar bajo tu luz, sabiendo que comprendes mis errores y que siempre puedo empezar de nuevo. Porque tú tienes confianza en mí, me esperas, y deseas que viva sanamente. Contigo todo será para bien, aunque yo no pueda verlo. Aplaca mi interior inquieto, seréname y pacifícame. Amén.
Hay un refrán que dice: “Con las piedras que me arrojen, construiré mi casa”. Cuando la vida te entregue un agrio limón, ¿por qué no lo exprimes y te tomas una agradable limonada? La capacidad de transformar un menos en más, es propia del hombre que no se deja frenar por los obstáculos, sino que se apoya en ellos mismos para proyectarse mucho más adelante. Que medites esta posibilidad y la hagas una realidad en tu vida.
* Enviado por el P. Natalio