La flecha de cupido me atravesó,
me dío directo ese día en el pecho,
de pronto mi cuerpo se trasformó,
cuando sentí el impacto en el corazón.
Comencé a sentir cosas mágicas,
en ese instante empecé a amar.
En el cielo salio de nuevo el sol,
y las estrellas empezaron a brillar.
El viento nos fundió en un abrazo,
el rocío humedeció todo mi cuerpo,
sentí cerca su perfume y su aliento,
y me quemaba el calor de sus besos.
Desde que cupido su flecha atravesó,
ahora él es el dueño de mi corazón.
La vida se transforma en un momento,
por eso expreso todo lo que siento.
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