Como gacela indómita
en cristalino cautiverio,
al contacto elevado...
sostenida catira trepidante
de blonda cabellera
y espiga cálida de plata,
adherida a tus sueños...
Estuario armonioso
nítido vestigio de un instante,
atavío coronado a tus deseos,
adagio sutil de crepúsculo
delicadas notas de susurros
cadencia de azules anhelos.
Castillo nacarado
frontera entre dos mundos
fusionados al compás apasionado,
balaustre bañado de lluvia
refulgir de los astros
ante el sonrojado amanecer
que muere allanado por un beso.
No habrá mas cauce cristalino
que el derramado en las llanuras
de mis ansias...
recinto amurallado de pasiones,
se acopla la opera profusa
en suave armonía de colores,
y el sumiso esplenio inerte
reposa cálido en mi vientre...
Yulinn