Vencer con el bien el mal
Amado Dios y Padre celestial:
En ocasiones somos ofendidos, perseguidos, humillados, maltratados; pero yo no quiero pagar mal por mal ni tomar ninguna clase de venganza en mis manos, sino que, en el momento del conflicto, pueda poner mis causas en tus manos, confiando y esperando. Ayúdame a recordar que Tu dices que "tuya es la venganza, que Tu pagarás". Sabiendo que tu intervención en las vidas de tales personas es para salvación, confío plenamente en que, en tu tiempo, he de ver en sus vidas la huella de tu mano. Pon en mi corazón tal compasión que pueda alimentar y saciar la sed de mis enemigos si fuera necesario. Enseñame a siempre bendecir a los que me persiguen y a vencer con el bien el mal. En el nombre de JESÚS, AMÉN
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