Cómo quieras que sea
Aquello que genuinamente esperas, lo que sea, lo vas a expresar
en tus palabras, tus acciones y tu vida. Ya estás trabajando para darle forma a lo que sea
que esperes con total certeza, incluso aunque no te des cuenta de que lo estás haciendo.
Preocuparse es una forma poderosa de expectativa negativa. Preocuparte una y
otra vez, reiteradamente por lo mismo, da lugar a la realidad de aquello
por lo cual estabas tan preocupado, y eso claramente no es lo que tú querrías.
Sin embargo resulta igual de posible, e igual de poderoso, esperar sinceramente
lo mejor. Si puedes visualizar razones para preocuparte, también puedes
visualizar razones para sentirte confiado en cuanto a expectativas más positivas.
Pon la fuerza de tus expectativas a trabajar de manera concreta y enriquecedora.
Dile a tu vida cómo quieres que sea, esperando lo mejor de ella en cada instante
y en cada situación.
Ten la expectativa de, sinceramente, concretarlo,
y esas mismas expectativas te llevarán a encontrar la manera.
En lugar de luchar contra tus preocupaciones, siéntete empujado a
avanzar por las expectativas, muy reales y poderosas, que tienes sobre
la vida positiva que pretendes vivir.
El futuro aún no ha ocurrido, así que asegúrate de que cuando suceda,
resulte ser de tu agrado. Sabiendo que puedes esperar lo mejor,
encárgate de hacerlo así.
— Gabriel Sandler