Señor, te pído en esta Navidad, y para todo
el nuevo año:
Que el dolor no me quite la Fé. Que la vida no
se lleve mi alegría. Que el trabajo no sea para la
ambición. Que la obra no sea para el mundo.
Te pido que mis sentimientos sean humanos,
mis acciones limpias y mis reacciones por amor.
Que mis pasos no se contaminen, mis argumentos no se confundan
y mis regalos no se materialicen.
Que no entre la indiferencia a mis soledades.
Que no entre el miedo en mis avances.
Que no entre la presunción en mi sencillez.
Que no entre el rencor en mi corazón.
Que no entre el frió en mi conciencia.
Que no entre la nostalgia en mi pasado.
que no entre el vació en mi presente.
Que no entre la impotencia en mi futuro.
Que no toque el amor en mi puerta cerrada.
Que no llegue tu voz en mis oídos sordos.
Que el Nacimiento no sea para decorar, sino
para verte nacer. Que no sea un pretexto para la
diversión, sino una motivación nueva ante el
milagro.
( Autora: Zenaida Bacardí de Argamasilla
Libro: Ramillete de Estrellas)