Un hombre que habia robado toda su vida estando en la cárcel enfermó y estaba muriendo. Un pastor fue le tuvo pena y fue a orar por él, le dijo que creyera en Cristo y sea salvo. El oró y le impuso las manos para que repita la oración. Al abrir los ojos el pastor ya no tenia su reloj pulsera! Miró al enfermo y vio que murió con su pulsera en sus manos, hasta el ultimo momento de la oración del pastor robó! Si no decidim̀os vivir en rectitud, solo seremos esclavos del mundo y no saldremos de la condición en que estamos. Si decidimos de verdad, y cuando venga el diablo a tocarnos la puerta no le abrimos se ira.Yonggi Cho