Seamos Honestos: - Fraternalmente unidos

Y yo rogaré al Padre ,y os dará otro Consolador,
para que esté con vosotros para siempre.

Leer | Juan 14:26

Seamos honestos: algunas partes de la Biblia son difíciles de entender.
¿Ha leído usted alguna vez una porción una y otra vez, tratando de comprender exactamente lo que Dios está tratando de decir? Por fortuna, nuestro Padre celestial ha bendecido a los creyentes con un instructor.

El maestro es el Espíritu Santo, que vive dentro de nosotros y sirve de puente entre nuestra limitada comprensión y la omnisciencia divina.

En Juan 14:26, Jesús les dice a los discípulos: "El Espíritu Santo os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho". Si tenemos dificultades para entender un versículo, o estamos luchando para recordar una verdad bíblica, el Espíritu Santo puede guiarnos al conocimiento que estamos buscando.

¡Qué bendición tan grande es tener como instructor al Espíritu de Dios mismo! Ninguna persona es capaz de comprender la mente de Dios. Pero el Espíritu Santo un miembro de la Deidad trina puede proporcionarnos el conocimiento que necesitamos para madurar y conducirnos con éxito en la vida cristiana.

Dios envía el Espíritu Santo no sólo para ayudarnos a comprender, sino también para transformar nuestra vida. Él quiere conformarnos y moldearnos como creyentes semejantes a Cristo, y por eso nos recuerda esas áreas de nuestra vida que necesitan perdón, y nos muestra cómo manejarlas.

Felizmente, el designio de Dios no fue que la vida cristiana fuera un viaje sin compañía. Todo creyente tiene un compañero e instructor: el Espíritu Santo.

Cuando le surjan preguntas y se le acumulen tareas aparentemente insuperables, confíe en que Él le dará la respuesta y le sostendrá.

Mas el que sostiene a los justo es Jehová: Salmos.37:17;