PAZ
" Si quieres que impere la paz en el mundo, debes tener paz en tu hogar, y para que la paz reine en tu hogar, debes primer vivirla en tu corazón." ( Prov. chino)
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Yo, personalmente me identifico mucho con éste proverbio.
Llevar la paz en el corazón incluye muchas cosas.
Vivir en armonía con el Creador y todas las maravillas por él creadas, es tener paz.
Conseguir el equilibrio en nuestra vida, que la aguja de nuestra balanza interna esté justito en el medio, que sea estable, también es tener paz.
Cuando amamos a Dios y lo ponemos en primer lugar, amamos a nuestros hermanos, los animales, las plantas, el universo, tenemos paz.
Cuando nos olvidamos de los odios y venganzas, que se fueron acumulando entre las naciones durante años y años, encontraremos la paz.
Si enfrentamos el nuevo día con nuevas ilusiones, fe, esfuerzo y esperanza, sabremos que la paz camina a nuestro lado.
La felicidad de ser cristianos y que trascendemos más allá de éste vida, nos dá paz, y además nos enseña como sobrevivir para perseverar hasta el fin.
Cuando hagas de tu casa un hogar acogedor, allí tendrás paz.
Cuando tiendes tus manos para regalar y sonrisas para alegrar, estás brindando paz.
Si sábes valorar tu vida, es porque hay paz en ella.
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La paz no es estar a salvo de cualquier tormenta emocional que la vida nos presente, sino encontrarla en medio de ella.
Es un estado interno de tranquilidad y descanso del alma abrazando en silencio nuestros mundos profundos y luminosos.
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Enarbolemos la bandera de la paz, trabajando incansablemente por ella.
Que se acaben las guerras entre los pueblos y también las guerras internas entre los hombres, porque allí empieza esa paz que tanto ansiamos, en el ser interno de cada ser humano.
El saludo de Cristo siempre fué: " La paz sea con vosotros" ( Mateo, 10:12).
Jesús se puso en medio de ellos, y les dijo: " Paz a vosotros" ( Lucas, 24:36).
" La paz os dejo, mi paz os doy" ( Juán, 14:27).
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Para conseguirla no debemos albergar mas odio alguno, limpiándonos de cualquier resentimiento, olvidándonos de las ofensas o daños que nos hicieron.Encontrémonos en nuestro amor al Creador, porque él es el Dios del amor y la paz.
Que nuestra conciencia albergue siempre el deseo de la paz, que se instale en nuestro corazón, para que desde allí podamos transmitirla a todos los hombres.
" Si es posible en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres." ( Romanos, 12:18).
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Que hermoso sería que las naciones construyeran un mundo de paz en nombre de Cristo, EL PRÍNCIPE DE PAZ, pero es difícil!!! Porque la mayoría de la humanidad no ama al prójimo, sólo quiere guerrear, en vez de tratar de coincidir con el otro en nuestro amor a Dios, sin mirar lo que nos separa o nuestra diferencia de razas.
" Solícitos en guardar la unidad del espíritu en el vínculo de la paz" ( Efesios, 4:3).
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Felices son aquellos que viven en familias en las que reinan el amor y la paz. Seamos pacíficos para llegar a ser pacificadores. " Bienaventurados los pacíficos, porque ellos serán llamados hijos de Dios" ( Mateo, 5:9).
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Que la paz llegue a reinar en el corazón de los hombres.
LEONOR