Para la psicóloga de neuropsiquiatría infantil del Hospital San Borja, Ivette González “resulta difícil poder establecer una distinción particular entre el síndrome de déficit atencional y el comportamiento hiperactivo, por lo que el niño suele presentar los dos síndromes al mismo tiempo, lo que se conoce como SDA-H (síndrome de déficit atencional con hiperactividad).

Los niños que sufren este trastorno a veces parecen no escucharte, cometen errores por descuido, tienen muchas dificultades para mantener la atención, no te obedecen, ni hacen caso y en general no siguen instrucciones, tienen dificultad para organizarse, son distraídos por lo que suelen perder objetos, por su hiperactividad tienen dificultad para permanecer sentados, mueven las manos y los pies sin control, saltan o corren en situaciones inapropiadas, hablan en exceso, responden a la rápida, sin pensar y son atarantados.

La psicóloga aclara que estos síntomas se deben dar en dos o más contextos diferentes, por ejemplo, en la casa y en el colegio, si sólo se presentan en una situación, es probable que sea por motivos distintos al déficit atencional, además se deben presentar antes de los 7 años.

Todos estos efectos del síndrome de déficit atencional le provocarán también una baja autoestima debido a que se dará cuenta que no esta al nivel de sus compañeros en cuanto a rendimiento, lo que también traerá frustración si no logra tener buenas notas, pese a que se esfuerce.

Un clima familiar desfavorable, al igual que el escolar y también una alimentación demasiado rica en sacarosa, aspartame, aditivos y/o colorantes, pueden aumentar el riesgo de padecer este trastorno.

Tratamiento para el síndrome de déficit atencional

Es importante que para el tratamiento de este síndrome se consulte debidamente con un especialista, el cual generalmente comenzará con un tratamiento con fármacos, que su tipo y dosis dependerán de cada caso. También es recomendable que exista paralelamente un tratamiento psicológico.

La especialista indica que existe un abordaje terapéutico que ha tenido gran efectividad en este tipo de patologías y es la terapia cognitivo conductual, donde es importante hacer hincapié en la resolución de problemas sociales y en la anticipación y las consecuencias de la acción. Con este tipo de manejo, los niños suelen desarrollar de mejor manera sus habilidades sociales y ser aceptados por su grupo de pares.

Los medicamentos que se recetan para este síndrome afectan directamente en la actividad de la corteza neuronal y que aumentan por tal motivo los procesos del pensamiento, que beneficia la atención, memoria y razonamiento.

El niño con síndrome de déficit atencional puede permanecer durante la mayor parte de su vida con tratamiento y es aconsejable continuarlo, debido a que siendo adultos beneficiaría su rendimiento laboral.