Mensaje del padre Larrañaga: Por el Abandono a la paz
Este mensaje contiene conceptos maravillosos que nos servirán para ser felices, una felicidad que no se logra con ningún otro medio. El mensaje profundiza en los siguientes subtemas:
* Un "no"y un "Si"
* Los enemigos los engendramos nosotros mismos
* Los que sufren, hacen sufrir
* Lo que se ve y no se ve
* La fé, única ventana de salida
* No sabemos nada
La experiencia con Dios es una experiencia oblativa y no emotiva, es oblativa porque hay un morir. Un morir al resentimiento, un morir al miedo. Un morir a la venganza. Un morir a la depresión. Un morir a los pecados capitales...un morir a todo brote agresivo y dañino al corazón de cada uno de nosotros. El abandono es un concepto dinámico, no pasivo; el abandono es acción, no cruzarse de brazos; hay que intentar y lograr el máximo nivel de eficacia, de productividad. Los enemigos están dentro de nosotros, los creamos nosotros.
El temor no es nuestro enemigo, sino nuestro miedo al temor; la muerte no es nuestra enemiga, sino el miedo a la muerte. Descansar significa paz, hacerse amigo de todos, pero primero ser amigo de si mismo. Fórmula maravillosa es acoger todo como "amigo". Mi amiga, la muerte; mi amigo, el temor; mi amiga, la pobreza; mi amigo, el odio; mi amigo, el dolor ...Todo esto no es más, que la reconciliación, la angustia transformada en paz.
El abandono implica luchar al máximo para cambiar, todo lo que pueda cambiar.
También es cierto, que hay realidades que no puedo cambiar, sólo aceptarlas:
Mis padres, nadie escogió a sus padres ; Mi cuerpo, nadie escogió el color de sus ojos... ante situaciones insolubles, doblar las rodillas y entregarse al Padre. Dejar en sus manos todo aquello que no puedo solucionar, a pesar de mi esfuerzo.
El abandono es silencio en la mente y paz en el corazón. Un disgusto, nadie lo crea, sólo yo le doy vida; no amargarse,olvidarlo(silencio en la mente), entregarlo en manos del Padre (paz en el corazón).
Cantemos: Entre tus manos
Entre tus manos,
está mi vida Señor
entre tus manos
pongo mi existir.
Hay que morir, para vivir,
entre tus manos confío mi ser
La palabra angustia significa estar -apretado- sentirse en una sombra oscura. Estamos hechos por Dios para vencer las resistencias, logar la paz y ser felices.
Basta de sufrir inútilmente, nunca hechar las culpas a nadie. No esperar nada de nadie, sólo de nosotros mismos. Salvémonos nosotros mismos, seamos más felices, sufriendo menos. Nada de miedos, nada de angustias, nada de depresión. En el mundo espiritual, hay que distinguir lo que se ve de lo que no se ve; por lo tanto , el abandono es una visión de fé, es la única ventana de salida.
Aceptemos con paz todo aquello que no podamos cambiar. No sabemos nada, Tú lo sabes todo, Señor. La Práctica del abandono nos hará fuertes, casi invencibles. (Terminado el mensaje, quedarse dos minutos en silencio activo, esto es buscar las palabras y conceptos que más tocaron el corazón).