Jorge y Viviana Aimaretti están en Tandil. Este matrimonio desde hace un mes está en esta ciudad, pero no de vacaciones. Están aquí por una situación crítica en sus vidas. Mucha gente de todo el mundo está pidiendo a Dios por ellos y su hijo Agustín de 20 años. No deja de impactarme la forma en la que ellos están atravesando esta situación siendo una influencia positiva para mucha gente en esta ciudad. Le pedí a Jorge que escriba algunas líneas. Él nos contará algo sobre lo que están viviendo:

“No perder una oportunidad…
En este caso, no quisiera referirme a la pérdida por la compra de un perfume importado en algún Free Shop, o de alguna liquidación del un Outlet, o el descuento del Súper por alguna promoción en particular.
No perder la oportunidad en esta ocasión está referido al hecho de aprender.

Les cuento: como familia estamos atravesando una fuerte prueba. Nuestro hijo de 20 años hace más de 1 mes que está en coma, por un accidente automovilístico y tiene para algún un tiempo más. Estamos a 350Km. de nuestro hogar y un pronóstico incierto, tanto sobre la sustentabilidad de su vida (lo más importante), como en la calidad de vida que tenga ya que neurológicamente no se sabe las consecuencias que deberá enfrentar, un futuro incierto en lo laboral etc.

Es entonces que recordé que en un curso de capacitación nos dijeron: “Depende de Uds. como quieren aprovechar esta capacitación, absorber la información como un SECANTE o como una ESPONJA….”

La diferencia es que el secante copia fielmente el trazo de la escritura hecha, pero a la hora de reflejarla lo hace tipo espejo, justamente en forma inversa. En cambio la esponja absorbe toda la tinta derramada y al ser presionada vuelca todo lo que absorbió.

Quiero motivarte a que no pierdas a oportunidad de aprender, estés en la situación que estés. Crisis es sinónimo de OPORTUNIDAD, DE CAMBIO. No somos iguales después de ser pasados por el fuego de la prueba y solo Dios nos da las herramientas para vencerlas. Absorbé como una ESPONJA”.

 

Amigo, en lugar de la queja Jorge y su familia, mientras piden a Dios por un milagro, están dispuestos a Aprender. Mientras ellos aprenden, sus vidas nos enseñan. ¡Qué bueno! Cuando decidimos aprender podemos multiplicar ese aprendizaje en otros. ¿Qué querrá enseñarte Dios en este tiempo? Y, por otro lado, te invito a pedir en este día por la recuperación de Agustín.   

GUSTAVO BEDROSSIAN