Temas Médicos:
Claves para prevenir la diabetes
Una dieta sana, no fumar, no beber, mantener un peso normal
y realizar actividad física reducen hasta un 80% el riesgo de
desarrollar diabetes. El mayor estudio realizado hasta la fecha
sobre los efectos de un estilo de vida saludable confirma de
manera tajante lo que los médicos llevaban tiempo sospechando,
aunque no imaginaban que el beneficio fuera tan grande.
“La relación entre estos hábitos y la diabetes es muy
significativa y bastante sorprendente”, afirma Jared Reis,
principal autor del trabajo y epidemiólogo del Instituto Nacional
de Corazón, Pulmón y Sangre de Bethesda, Maryland (EEUU).
Cada factor, por separado, disminuye las posibilidades
de padecer esta enfermedad, pero juntos multiplican su
acción positiva. Así lo demuestra una investigación,
publicada en ‘Annals of Internal Medicine’, que ha analizado
durante una década a 200.000 hombres y mujeres entre los
50 y los 71 años que, en el momento de empezar el estudio
(entre 1995-1996) no tenían ningún problema de salud.
Diez años después, el 10% de los participantes de ambos
sexos habían desarrollado diabetes.
Entre ellos, la mayoría tenía hábitos de vida poco sanos.
Los autores indican que su trabajo prueba definitivamente
que dejar de fumar o reducir el consumo de grasas
saturadas previene esta patología.
Si una persona mantiene un peso normal, si realiza
al menos 20 minutos de ejercicio físico tres días a la
semana, si prescinde de los cigarrillos, cuida su
alimentación y bebe poco alcohol, tiene
pocas opciones de ser diabético.
Y, aunque todos los factores influyen, si hubiera que
elegir uno, por su mayor impacto, sería el peso.
“Lo primero que recomendaría es que la gente cuidara
su índice de masa corporal y que evitara pasarse de kilos”,
explica a Reuters el doctor Lawrence Phillips,
endocrinólogo de la Universidad Emery de Atlanta (EEUU).
“Se trata de estilos de vida fácilmente modificables
en la vida real y con gran impacto en la salud”,
admite a la prensa estadounidense Robert Henry,
presidente de medicina de la Asociación Americana de
Diabetes. Por sus aplicaciones inmediatas “este
estudio es más importante ahora mismo que cualquier
ensayo clínico, que no tiene tanto impacto”, añade.
El estudio también indica que si no se llega a tiempo
para prevenir la enfermedad -que afecta a 30 millones de
personas-, sí que se puede evitar que vaya a más
si se cambian estos hábitos de vida.