Cosas Grandes haré contigo
“Y él contestó: He aquí, yo hago pacto delante de todo tu pueblo; haré maravillas que no han sido hechas en toda la tierra, ni en nación alguna, y verá todo el pueblo en medio del cual estás tú, la obra de Jehová; porque será cosa tremenda la que yo haré contigo”.
Éxodo 34:10
Este versículo para mí es muy especial, pues hace algunos años una hermana y amiga de la Iglesia me lo dedicó. Desde entonces quedó en mi corazón, lo atesoro y en momentos difíciles sus palabras me sostienen.
Es importante que recuerdes el día de hoy que cuando Dios hace un pacto, él es fiel y lo cumple. Y para hacer un pacto se requieren dos personas o más. En este caso cuando Dios hace un pacto contigo, es de ambos y debes permanecer fiel aunque tengas que pasar por diversos momentos. Aún cuando la duda quiera confundirte o atormentarte, tienes que seguirle creyendo. No puedes abandonar, ni permitir que el enemigo tome ventaja.
Dios dice que cuando le somos fiel y nos dejamos utilizar por él, hará maravillas, cosas fuera de lo común para mostrarnos su gloria. Pero lo más lindo es que la gente que nos rodean serán testigos, presenciaran las obras hermosas que Dios hará con nosotros. Y no es cualquier cosa la que Dios hará, sino algo tremendo.
Y cuando yo leo este texto mi alma se regocija en sobremanera. Porque es promesa de Dios, porque la palabra de Dios es viva y da luz a nuestras vidas y certeza a nuestros corazones. Por tal razón si tú estás esperando un milagro, puede que tu pienses que él se ha olvidado de ti o que se está tardando mucho. Pero, ojo, que Dios ni se adelanta ni se retrasa, ¡él llega en el momento preciso! No en tu tiempo ni en el mío, sino en el de él.
Aunque por dentro estés llorando y te sientas a punto de reventar. Aunque estés en una situación donde quisieras volar lejos o desaparecer… CREEME QUE TU BENDICIÓN DEBE ESTAR MUY CERCANA. Por eso es que el enemigo se ha levantado con más intensidad queriéndote derrumbar, porque él sabe que le queda poco tiempo, porque lo que tanto has esperado está a punto de llegar y no habrá reversa. Hoy puedes repetir las palabras de David cuando se enfrentaba ante aquel gigante: “Tu vienes contra mí con espada y jabalina, más yo vengo contra ti en el nombre de Jehová”.
¡No te quites, el tiempo se está acercando, ya estás llegando a la meta!
Autora: Brendaliz Avilés