EL PLANETA SE CALIENTA
El planeta Tierra es maravilloso. Es el tercero del Sistema Solar, y el quinto -de los ocho- según su tamaño. Se diferencia de los demás porque posee vida. Es la morada de miles de millones de seres humanos. Pero paradójicamente, nosotros los humanos, lo estamos destruyendo.
La atmósfera del planeta está compuesta por muchos gases, el más importante es el oxígeno (O2), porque es fundamental para la vida. Otros, como el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el dióxido nitroso (N2O), son denominados gases de efecto invernadero (GEI), y en pequeñas cantidades son vitales para nuestra supervivencia. Sin embargo, desde que el hombre empezó a explotar los productos naturales con el fin de generar combustible para las máquinas que facilitan el progreso el incremento desmedido de estos gases ha originado el calentamiento global, una manifestación del cambio climático, que consiste en el aumento de la temperatura atmosférica. Todos los objetos y seres vivos emitimos radiación en el rango de 10 micrones, lo que se llama radiación infrarroja. “Ciertos gases que tienen la capacidad natural de absorber ese tipo de radiación, el principal es el vapor de agua”.
Gracias al él la temperatura promedio de la Tierra es de 15°C. Sino fuera por el efecto invernadero natural sería de -15°C, es decir, no existiera vida en el planeta”, como ocurre en Marte que es tan frío que no hay agua, sólo hielo, y hasta los momentos no se ha encontrado vida, porque su atmósfera es muy delgada y casi no tiene GEI. Lo contrario ocurre con Venus, que tiene una atmósfera muy espesa, compuesta en su totalidad por GEI; su superficie es 500ºC más caliente de lo que sería sin esos gases
Con el crecimiento de la población mundial estamos aumentando la proporción que había en la atmósfera de los gases CO2, CH4 y N2O, y el aire tiende a calentarse, ésa es la causa del calentamiento global que produce en cascada una serie de alteraciones que ocasionan el cambio climático.
El clima ya cambió. En todo el mundo acontecimientos que eran raros y esporádicos están sucediendo con mayor frecuencia; el periodo de sequía es más largo, traducido en olas de calor; la estación lluviosa está durando menos días pero las precipitaciones son más intensas; los polos están derritiéndose, lo que lleva a un aumento del nivel del mar; se están calentando los mares, lo que incrementa la energía de las tormentas entre otras alteraciones ambientales. Todo tiene un impacto global. Los científicos han señalado que si los océanos se calientan, los corales morirán y las consecuencias son inimaginables. Si desaparecen, muchos países se quedarán sin algo más que una maravilla natural, perderán su mayor defensa contra el mar. Existe mucho escepticismo sobre las catástrofes que pudieran generarse en las próximas décadas a causa del calentamiento global, pero “todo dependerá de la temperatura que se alcance”, dice.
En estos momentos la temperatura del planeta está cerca de los 16°C. Cuando comenzó la Revolución Industrial, la concentración de CO2 estaba en el orden de las 268 partes por millón. En la actualidad estamos cerca de las 369 partes por millón..
Si se logra estabilizar esas concentraciones en 500 partes por millón (aprox) para finales de este siglo, la comunidad científica estima que las consecuencias pudieran ser manejables para nosotros y los ecosistemas, y en unos 200 ó 300 años la temperatura promedio pudiera estabilizarse en los 17°C. Si no logramos estabilizarlas se incrementarían de cinco a seis grados, llegaría a 21°C y las consecuencias no son alentadoras.
Nosotros estamos haciendo que cambien las condiciones que determinan la temperatura del aire, pero en el planeta Tierra, que es un sistema en equilibrio inestable, la temperatura promedio debiera ser constante. En estos momentos no es constante, está aumentando..
La eficiencia energética
Es un conjunto de medidas que permiten mejorar el uso y cantidad de energía consumida, al tiempo que minimiza los impactos negativos sobre el ambiente. Es uno de los principales desafíos en la gestión ambiental moderna, clave en la mitigación del cambio climático.
Si todos fuéramos más eficientes con nuestra energía, ayudaríamos a mitigar el calentamiento global.
Todos podemos contribuir para que nuestro planeta deje de recalentarse, aquí les ofrecemos las siguientes alternativas:
No encienda las luces de la casa si no es estrictamente necesario, ni dejar aparatos prendidos toda la noche. Recuerde de las mayores fuentes de CO2 es la generación de energía.
Usar eficientemente la energía, no significa emplearla en actividades innecesarias y conseguir hacer las tareas con el mínimo consumo de energía posible, sino desarrollar tecnologías y sistemas de vida que ahorren energía y reduzcan en forma sustancial las emisiones de gases de efecto invernadero.
Reduce la generación de basura y de no contaminar el agua, ya que está relacionado con el aumento del metano en la atmósfera.
Trate de que los vehículos sean menos contaminantes.
Procurar que los nuevos desarrollos se hagan usando mayor proporción de energías limpias.
No deforeste y estimule la reforestación.
No comprar artículos desechables y plásticos que no son biodegradables.
Use racionalmente los plaguicidas.
Evite el consumo de tabaco.
Cuide los bosques, no provocar incendios ni destruir las zonas verdes de la ciudad.
En su hogar usa energía solar y eólica. Además normalmente utiliza el transporte público o su bicicleta para trasladarse
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