La vida está llena de cosas que nos estresan, y pareciese que cada día encontramos algún nuevo motivo para sentir estrés. ¿Verdad que sí?
Tenemos que aprender a controlar nuestras emociones, especialmente aquellas que nos producen baja autoestima.
¿Por qué estresarnos intentando agradar siempre a los demás?
Emoción significa: Reacción afectiva de gran intensidad producida por un sentimiento y estrés: Tensión o falta de tranquilidad que se siente ante una posible amenaza sea real o imaginaria…
Las emociones mal manejadas son causantes de la toma de malas decisiones, de corazones quebrantados y un sin número de dolores de cabeza innecesarios. Administramos mal nuestras emociones cuando permitimos que en nuestro corazón se alojen sentimientos de soledad, baja autoestima, rechazo, amargura, etc.
Estos sentimientos se desatan por tener pensamientos inadecuados sobre nosotras mismas, o por intentar buscar en las demás personas lo que necesitamos para sentirnos completas sin comprender que dentro de nosotras mismas esta todo lo que necesitamos para sentirnos plenas.
Por todo ello, nos convendría renunciar al vivir dependiendo del intentar agradar a siempre a los demás, o de que la posible o no posible circunstancia de que la persona que nos gusta nos haga esa llamada telefónica que tanto esperamos, o se concrete esa anhelada cita que quizás nunca se de.
Renunciemos a la esclavitud del estrés emocional en nuestras ya de por si estresadas vidas, pues sólo nos consume las fuerza que necesitamos para llevar una vida plena y feliz y emprender nuevos caminos para el logro de nuestros sueños.
Desatemos en nosotras mismas el autodominio, la templanza, la firmeza de carácter para transformar nuestros sentimientos negativos en positivos tales como la serenidad, paz y armonía interior necesarias para vivir felices y victoriosas. Podemos hacerlo, somos mujeres, somos capaces.
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