Cuando usted pasa
por momentos difíciles, cuando su corazón está apesadumbrado y cargado, Dios
está ahí, justamente cuando las cosas se ponen peor. A veces da la sensación de
que Dios se aparta de usted cuando llegan los problemas, pero eso no es cierto:
“Cercano está Jehová a
los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de
espíritu.” Salmo
34:18.
¿Qué situación ó qué
adversidad hace que hoy se rompa tu corazón? Problemas
conyugales, familiares, económicos, problemas de salud, etc. En estos momentos
en que parece que estamos perdidos y derrotados, podemos sentir la presencia
maravillosa de nuestro Dios. Él se duele de nuestras tristezas y amarguras. El
se acerca a nosotros y podemos sentir su consuelo.
Cuando en medio de
nuestras angustias clamamos a Él, con sinceridad, desde lo más profundo de
nuestro corazón, Él nos escucha. “Claman los justos, y el
Señor oye, y los libra de todas sus angustias” Salmo
34:17. Dios nos da la
sabiduría para tomar las decisiones que nos sacan del valle más profundo; nos da
las fuerzas que nos impiden salirnos del camino y caer en la desesperación. Su
presencia es real y permanente en nuestras vidas.
Puedes decir
confiadamente hoy y todos los días de tu vida: “En él puedo
descargar mi angustia; sin temor le puedo expresar mis quejas. Cuando estoy
perdido, tú me muestras el camino” Salmo
142:2-3.
ORACIÓN
“Soberano Dios y
Padre Celestial: Tiendo hacia ti mis manos; te necesito, como la tierra necesita
de la lluvia. Tus ojos están sobre los justos y atentos tus oídos a mi clamor.
No se pondrá jamás tu sol, ni menguará tu luna, porque tú me serás por luz
perpetua y los días de luto serán acabados. En ti confía mi corazón y siempre tú
me ayudas. Clamo a ti y oyes mi oración y me libras de todas mis angustias.
Recibe la honra, la gloria y la alabanza, en el poderoso nombre de mi Señor
Jesucristo.” Amén y
Amén.
-FELIZ
FIN DE SEMANA-