"Y clamó Asa a Jehová su Dios, y dijo: ¡Oh Jehová, para ti no hay
diferencia alguna en dar ayuda al poderoso o al que no tiene fuerzas! Ayúdanos,
oh Jehová Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos, y en tu nombre venimos contra
este ejército…Y Jehová deshizo a los etíopes delante de Asa" (2 Crónicas
14:11-12).
Mientras Asa y sus ejércitos llevaban la procesión triunfal de regreso a
Jerusalén, un profeta llamado Azarías les dio el alcance a la puerta de la
ciudad con este mensaje de parte de Dios: "Oídme, Asa…Jehová estará con
vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de
vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará. Muchos días ha estado Israel
sin verdadero Dios…pero cuando en su tribulación se convirtieron a Jehová Dios
de Israel, y le buscaron, él fue hallado de ellos"(15:2-4).
Aquí está el secreto de conseguir y mantener la presencia de Dios en tu
vida. El Señor recordó a Asa, a quemarropa, sin tapujos: "Asa, nunca olvides
cómo obtuvieron esta victoria. Me buscaron con todo su corazón cuando estaban en
problemas y Yo les envié Mi presencia. ¡Fue Mi presencia la que hizo huir a sus
enemigos!"
Ahora, Azarías le decía a Asa: "¿Te acuerdas cómo era el reino antes de
que fueras rey? Todo estaba fuera de orden, sin ley, sin orientación, sin
enseñanza justa. Nadie respetaba la ley, ¡cada cual hacía lo suyo!"
Ésta no es una teología complicada. Cualquiera puede tener la presencia
permanente del Señor si él o ella simplemente buscara al Señor para ello.
"[El Señor] será hallado de vosotros" (15:2). La palabra hebrea que se
encuentra aquí es matsa, que significa "Su presencia, brotando, para bendecir".
En resumen, este versículo nos dice: "Busquen al Señor con todo tu corazón y Él
vendrá a ustedes con Su presencia. De hecho, ¡Su presencia será un poder
omnipotente que emana de sus vidas! "