Querido Dios,
Tu sabes de penas y alegrias, cuando en las mesas hay o falta el pan; acompáñanos mientras trabajamos y luchamos para llevar pan a nuestras mesas pero ,Señor, no nos faltes tu y tu pañabra para que nuestra hambre de Dios se sacie plenamente para que podamos y queramos aliviar tantas miserias..... Papá........ y ,claro, ¡ cómo no! guía a esta hija tuya,Navarrete, por el mejor camino hasta tu plenitud.
FELICES SUEÑOS
un abrazo grande hasta Méjico