¿Puede ser una piedra una almohada?
"Y llegó a un cierto lugar, y durmió, ahí, porque el sol se había puesto;
y tomó de las piedras de aquel paraje y puso a su cabecera, y se
acostó en aquel lugar" Génesis 28:11.
Vemos que Jacob tomó una piedra y la puso por cabecera. Durante años
no entendía lo que significaba eso. Aunque no podemos entenderlo
según lo dicho externamente, si lo podemos entenderlo conforme a
nuestra experiencia interior. Antes de ser salvos no teníamos reposo.
Siempre sentíamos que estábamos en el aire o en el fondo del mar. No
había nada firme que nos sostuviera o nos mantuviera. Por muy rico que
usted haya sido, su dinero no podía apoyarlo. Por el contrario lo privaba
de la paz y del descanso. Antes de ser salvos no teníamos un apoyo
sólido, independientemente de que si éramos viejos o jóvenes, hombres
o mujeres. Sin embargo, un día fuimos salvos y algo sucedió dentro de
nosotros. Lo que hemos experimentado en lo más profundo de nuestro
ser produjo algo que se convirtió en nuestro sólido apoyo. seguro que
habremos pasado por dificultades después de ser salvos (convertirnos).
No obstante en nuestro interior, sentimos la seguridad de que hay una
roca sólida en la que podemos descansar. Esta roca sólida es el
elemento mismo, de Cristo, forjado en nuestro ser.
Ninguno de nosotros encontró descanso antes de ser salvo. En aquel día,
algo divino, algo de Cristo, fue forjado en nosotros y se convirtió en el
apoyo sólido dentro de nosotros. Este es nuestro descanso, nuestra
almohada. Nuestra almohada es el elemento divino, Cristo mismo,
forjado en nuestro ser.
Pastor Jaime Batista Cortes