Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Fraternalmente unidos
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 General 
 Normas de convivencia en el grupo-- 
 Lee la Biblia aquí! 
 Biblia en Power Point 
 Conoce tu Biblia 
 La Biblia en ocho versiones 
 Recursos Teológicos 
 Estudios biblicos 
 Reflexiones- Hernán 
 Selección de pasajes Bíblicos- por Hernán 
 Biografías de hombres de la Reforma protestante- Por Hernán 
 Arqueología Bíblica (por Ethel) 
 Reflexiones 
 Jaime Batista -Reflexiones 
 Tiempo devocional-Hector Spaccarotella 
 Mensajes de ánimo--Por Migdalia 
 Devocionales 
 Escritos de Patry 
 Escritos de Araceli 
 Mujer y familia- 
 Poemas y poesias 
 Música cristiana para disfrutar 
 Creaciones de Sra Sara 
 Fondos Araceli 
 Firmas hechas-Busca la tuya 
 Pide Firmas 
 Regala Gifs 
 Libros cristianos (por Ethel) 
 Panel de PPT 
 Amigos unidos-Macbelu 
 Entregas de Caroly 
 Regala Fondos 
 Texturas p/ Fondos 
 Separadores y barritas 
 Retira tu firma 
 Tutos 
 Tareas HTML 
 COMUNIDADES AMIGAS 
 
 
  Herramientas
 
General: NADIE ES PERFECTO, PERO...
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: hectorspaccarotella  (Mensaje original) Enviado: 10/07/2017 10:41

Solemos convivir con esta frase “Nadie es perfecto”.
Al mismo tiempo, nos comportamos cada día como si fuera obligatorio alcanzar la perfección en cada área de nuestra vida, en cada acontecimiento que afrontamos.

Un lúcido Harold Kushner, a lo largo de su libro “¿Debemos ser perfectos?”, nos confronta con múltiples ejemplos donde esta contradicción aparece a diario. Afirma en un párrafo: “¿Qué lleva a los hombres a la autoaversión y la conducta autodestructiva? La sociedad que enseña a las mujeres a sentirse avergonzadas de ser gordas o no atractivas, les enseña a los hombres a sentirse avergonzados de no ganar mucho dinero. (Y ahora que más mujeres entran en el mundo de los negocios, ellas también aprenden a sentirse insatisfechas consigo mismas por no tener éxito financiero). Por cada revista femenina con un artículo sobre dietas, hay un libro para hombres acerca de cómo ser mejor vendedor o un ejecutivo más eficaz. Y por cada actriz en la televisión o en las películas con un pelo perfecto y una figura sin fallas , hay un acompañante masculino con un traje de buen corte manejando un auto caro. En cierta ocasión, pasé unos días en Houston, Texas, donde conocí médicos y ejecutivos de seguros con ingresos anuales del orden de los cientos de miles de dólares, que se sentían de clase media baja porque no eran petroleros millonarios.
Mujeres ahogadas en su propia vergüenza se matan de hambre, usan ropa y zapatos incómodos y se someten a cirugías porque se les ha enseñado a odiar sus cuerpos pues no son suficientemente bellos. Los hombres trabajan hasta el colapso, beben demasiado o descargan en otros (las mujeres, los homosexuales, los judíos, los negros, los extranjeros) el odio que sienten hacia sí mismos, porque la sociedad, al evaluar su capacidad de ganar dinero, los considera fracasados…
La vergüenza y la culpa les enseñan a sentirse defraudados de sí mismos y los llevan a odiar a cualquiera al que le vaya mejor y a despreciar al que le vaya peor. Y nos preguntamos por qué la gente se siente tan sola y enojada y por qué la sociedad está tan fragmentada…”.

Lo que observa como “cura” a esta obsesión por los logros y la perfección es la honestidad, la debilidad compartida, el ser parte de una comunidad donde el grupo ofrece aceptación y perdón, al reconocer nuestras fallas, incompletud e imperfección. Es allí donde ya no hay necesidad de aparentar o poner excusas. Justamente expresa: “la seguridad de que si dejan de lado sus intentos de aparentar y sus excusas, y se paran ante Dios desnudos y vulnerables, si reconocen sus fallas como el primer paso hacia hacer algo al respecto, Dios nos los rechazará como especímenes fallados. Aún serán aceptables para Él”.

Que esta reflexión de Kushner nos invite a vivir este día (y cada día) recibiendo la Aceptación de Dios y nuestra propia aceptación más allá de nuestros fracasos o limitaciones. La solución no vendrá por ser más eficiente o por realizar más tareas en este día. Desnudos y vulnerables dejemos que el Amor de Dios nos envuelva para canalizar luego esa experiencia a quienes nos rodean.

GUSTAVO BEDROSSIAN



Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: Dios es mi paz Enviado: 10/07/2017 21:25

Ayúdanos Señor a vivir conforme a tu voluntad y vivir una vida llena de Tu paz y Tu amor
haciendo resplandecer tu luz, Araceli
Resultado de imagen para vivir conforme a tu voluntad señor


 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados