REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 8 DE SEPTIEMBRE DE 2017.
“Pero he tenido dolor al ver mi santo nombre profanado por la casa de Israel entre las naciones a donde fueron.” Ezequiel 36:21.
Es una queja del Dios Altísimo, cuando su pueblo, los que decimos conocerle, deshonramos su nombre que es infinitamente Santo, con nuestra vana manera de vivir y nuestros hechos. Si de verdad amamos al Dios y Padre Celestial, nuestras vidas reflejarán su gloria y contemplarán su misericordia.
La Biblia dice que somos embajadores de Cristo y como cristianos llevamos el nombre de nuestro SEÑOR JESUCRISTO. Por tanto, sería bueno preguntarnos:¿Qué piensa la gente de JESÚS, por lo que ve en nosotros? Hay un refrán que dice que: -Una imagen vale más que mil palabras-. ¿Qué imagen estoy proyectando a los demás?
Las compañías prestadoras de servicios compiten entre ellas, para ganar buen nombre y reputación. Bien saben que una mala calidad ó un mal servicio, pueden hacer que bajen sus ganancias, por el retiro de sus clientes.
De ahí que brinden con esmero cantidad de incentivos a sus usuarios para garantizar su comodidad. Si las empresas en la tierra, se afanan por su buen nombre, cuanto más debemos preocuparnos nosotros, para que el nombre de nuestro Dios que es ¡Santo!, ¡Santo! y ¡Santo!, no sea vituperado, sino exaltado y glorificado por nuestra causa.
Cada día necesitamos ser lavados por el SEÑOR de todas nuestras impurezas y cada segundo debemos permitirle hacer en nuestras vidas, eso que Él quiere y anhela que tengamos: “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne” Ezequiel 36:26.
Cuando las personas me conocen, ¿De verdad querrán conocer a Cristo por la imagen que yo proyecto de Él?
ORACION
“Soberano Dios y Padre Celestial: Mi vida en realidad solo tiene un propósito: reflejar a nuestro Señor Jesucristo. Dame sabiduría, endereza mis pasos, transforma mi vida de tal manera que los que me conozcan, quieran también conocerte a ti. Que lo que predique vaya acorde con mi forma de vivir y que tu nombre Padre Celestial no sea objeto de burla, por causa de mi comportamiento. Lléname de tu Santo Espíritu para que El dirija cada uno de mis pasos y que en todo te dé la gloria, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo” Amén y Amén.
- FELIZ FIN DE SEMANA-
ARBEY SERNA ORTIZ