PAZ CON DIOS - Fraternalmente unidos

Puede resultar casi una obviedad decir que la paz que habita en José es fruto de su relación con Dios, pero a veces es necesario detenernos en lo que es evidente, para descubrirlo, además, como fundante.

La fuente de toda paz la encontramos en nuestra relación con Dios. José dice que es “temeroso de Dios, lo cual significa que toma muy en serio a Dios en todos los asuntos de su vida.

Además, José fue reconocido por otros como un hombre sobre el cual “reposa el Espíritu de Dios”, lo cual significa que los frutos de la presencia de Dios se manifiestan en su vida. Aún en la adversidad José reconoce que Dios había estado guiando sus aflicciones hacia el cumplimiento de sus propósitos.

Finalmente, José también nos muestra su confianza en la fidelidad de Dios, cuando pide que sus huesos sean llevados a la tierra que Dios había prometido a sus padres.

Cuando los Beatles viajaron a oriente en busca de paz espiritual, huyendo de la histeria colectiva de occidente, se encontraron con un panorama bastante parecido al Egipto de José, allí había tantos ídolos y gurúes que terminaron más confundidos de lo que fueron. Cuando Cassius Clay, el famoso campeón mundial de boxeo, adoptó el islamismo en su búsqueda de paz, cambió su nombre por el de Mohamed Alí, pero tampoco esto le trajo verdadera paz.

Hay un solo camino que nos dirige hacia una paz fidedigna, la palabra de Dios. Hay un solo nombre por el cual podemos recibir la paz: Jesucristo. Hay una sola manera de estar en paz: reconciliados con Dios.

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