Cerrando las
fuentes de agua
No podrás evitar que el
enemigo se levante en contra tuyo, porque esa es su naturaleza, pero si podrás
cerrarle toda fuente de sustento.
Una de las mayores obras
de ingeniería hidráulica que se realizara en la antigüedad es la del
acueducto que se llevara a cabo durante el reinado del rey Ezequías en
Jerusalén. Esta obra consistía en cerrar el “acueducto de arriba”, que se
encontraba fuera del muro de la ciudad y además en alimentar un estanque
dentro de la ciudad, que luego se lo llamaría Siloe, por medio de la
construcción de un canal subterráneo, que le exigía no sólo destreza de
albañiles sino de ingenieros; ya que el pasaje tenía que ser taladrado a
través de una masa continua de roca, esto se desprende del relato bíblico y
del hallazgo de la “inscripción de Siloam”, descubierta en 1880, la cual se
encuentra en el Museo Arqueológico de Estambul.
Pero que fue lo que lo llevo al rey Ezequías a realizar tamaña obra? Esta
decisión fue en repuesta a que el rey asirio Senaquerib, envió a un poderoso
ejército, para conquistar Jerusalén, el cual acampo junto al acueducto del
estanque de arriba y por este motivo Ezequías les dijo al pueblo: “… ¿Por qué
han de hallar los reyes de Asiria muchas aguas cuando vengan?” (2da. Cron.32:4). El
rey Ezequías no podía impedir que estuvieran allí afuera de la ciudad
sitiándolos, pero si podía hacer todo lo posible para que su estadía no le
fuera fácil a sus enemigos.
Muchas veces en nuestra vida cotidiana nos encontramos en una situación
similar a la que vivió el rey Ezequías y el pueblo de Jerusalén, el enemigo
de nuestras almas, viene a nuestras vidas con el propósito de conquistarnos y
robarnos la bendición de Dios, y nosotros debemos de actuar como ellos
actuaron.
Ezequías y el pueblo entendieron que si no le cerraban el acueducto sus
enemigos podrían permanecer todo el tiempo que quisieran sitiándolos, por eso
le cerraron la fuente de su sustento, de igual manera nosotros debemos
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entender que cuando el
enemigo viene en nuestra contra tratará de encontrar fuentes de las que puede
beber y sustentarse por largo tiempo, esas fuentes pueden ser nuestra baja
autoestima, rencor, temores, frustración, inseguridad, esas situaciones irresueltas
en nuestra vida, le servirán siempre a él como una fuente de sustento para
luego venir en nuestra contra.
Hay una frase que dice: “no podrás impedir que los pájaros vuelen sobre tu
cabeza, pero sí que hagan un nido en ella” esto quiere decir que no podrás
evitar que el enemigo se levante en contra tuyo, porque esa es su naturaleza,
pero si podrás cerrarle toda fuente de sustento
Hoy es necesario que tomes
esta decisión de cerrar las fuentes de sustento del enemigo en tu vida, basado
en la palabra que el Rey Ezequías le dijo al pueblo “Esforzaos y animaos; no
temáis, ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que con él
viene; porque más hay con nosotros que con él. Con él es el brazo de carne, mas
con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos, y pelear nuestras
batallas. Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Ezequías rey de Judá.” (2da.Cron. 32:7 y 8).
Por Raúl Cuadro
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