Todavía se conservan restos de la Asturica Augusta, es decir, de la Astorga romana, que conviven con edificios modernos, como el foso del campamento, la muralla, las termas o el foro. ...Te mando un beso profundo, como anticipo a lo que tiene que llegar....
para todos
No importa si erraste de lleno, importa tus ganas de corregir, pues en este momento cuenta, lo que haces y un camino abrir
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CALOR A GOGO EN ESPAÑA
SANTORAL - ONOMÁSTICA
Santos del día 31 de Julio
Ignacio de Loyola , Fabio, Juan Columbano, Germán de Auxérre.
IGNACIO
Tratándose del personaje de que se trata, es verosímil que la etimología que se suele dar de su nombre, no sólo sea la acertada, sino incluso que él mismo la conociese y por ello hubiese elegido el nombre. Porque Ignacio de Loyola, no se llamaba así, sino Iñigo, pero cambió el nombre desde el momento en que decidió cambiar radicalmente de vida. Ignacio dicen que viene de la forma latina Ignatius, formada a partir de ignis, que significa fuego. Ignatius vendría a significar por tanto "inflamado", "portador de fuego"; porque realmente es eso lo que fue san Ignacio de Loyola, un volcán del que salieron ríos de fuego vivificador. El mundo no siguió siendo el mismo después de san Ignacio y de su Compañía, que como un ejército disciplinado fue conquistando posiciones en la Iglesia y en el mundo. Su anterior nombre, Iñigo, parece proceder de un topónimo vasco que significaría "lugar encrespado". En sus dos formas, este nombre ha hecho fortuna, siendo muy apreciada últimamente por los más castizos la forma de Íñigo. San Ignacio de Loyola nació en el castillo de Loyola, hoy en el término municipal de Azpeitia (Guipúzcoa) en 1491 (un año antes del descubrimiento de América) y murió en Roma, el 31 de julio de 1556.
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