CANCIÓN DE LA NOCHE SOLA
Fue mía una noche. Llegó de repente, y huyó como el viento, repentinamente.
Alumna curiosa que aprendió el placer, fue mía una noche. No la he vuelto a ver.
Fue la noche sola de una sola estrella. Si miro las nubes, después pienso en ella.
Mi amor no la busca; mi amor no la llama: La flor desprendida no vuelve a la rama,
y las ilusiones son como un espejo que cuando se empaña pierde su reflejo.
Amor de una noche: si vuelves un día, ya no he de sentirte tan loca y tan mía.
Más que la tortura de una herida abierta, mi amor ama el viento que cierra una puerta.
El amor florece tierra movediza, y es ley de la llama trocarse en ceniza.
El amor que vuelve, siempre vuelve en vano, así como un ciego que extiende la mano.
Amor de una noche sin amanecer.
¡Acaso prefiero no volverte a ver!
J.A.Buesa
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