Los animales son de Dios, la bestialidad es humana. Despues de todo, ¿no soy yo también un animal, esto es, un ser animado, vivo, y que sufriría, como sufren ellos, si alguien me lastima, me tortura, me aleja de mi hábitat y de mis seres queridos, y finalmente me mata, me descuartiza, y me vende para que otros me hiervan, me asen, me sazonen y me coman?
Un pps de Carmen-Drago