Durante los primeros siglos en la Iglesia Católica, el Aleluya se cantaba solamente el Domingo de Resurrección. Más tarde comenzó a cantarse durante todo el tiempo pascual. San Agustín, relaciona la liturgia con el tiempo celestial, diciendo que los que en la Tierra digan «Amén» para aceptar a Dios plenamente, en el Cielo dirán «Aleluya» para cantar su gloria y su poder..
Un pps de autor anónimo.
Publicado por Axosola en www.Pdencuentros powerpoints.com