Vale la pena luchar por todo aquello que nos rodea, las pequeñas cosas están llenas de vida; vida que vale la pena vivir, que vale la pena luchar, vida llena de vida. A mi alrededor florece, sólo tengo que fijarme bien pequeños fragmentos que embriagan mi día a día y que cuando me voy a dormir invaden mi cabeza como un fotograma de mi vida;
vida que vale la pena vivir, que vale la pena luchar, vida llena de vida.
Los hijos, nietos y familiares, los buenos amigos; aquellos a los que sólo con una mirada te dicen todo; aquellos a los que nunca has conocido y quisieras conocer; aquellos a los que conociste y te alegraste de conocer; vida que vale la pena vivir, que vale la pena luchar
vida llena de vida.
La inocencia de un niño, la sabiduría de un anciano, la fidelidad de un animal, la mirada agradecida del prójimo, el brote de una flor, el olor de mi ciudad, la brisa del mar, el verde de un valle, la lluvia a través del cristal, el viento mi pelo soplar, el calor del sol, el susurro de las palabras, la suavidad de la piel, la sonrisa de quien amo, la dulzura de una caricia, la luz de la luna, el canto de un pájaro…
La vida está llena de cosas maravillosas; vida que vale la pena vivir
que vale la pena luchar, vida llena de vida.