Me has dejado aquí, me pides un tiempo para pensarlo, yo he hecho hasta lo imposible por ti, desde ese día que vi tus verdes ojos en mi vida, que poco a poco fueron clavándose en mi interior como dagas mortales.
Hoy que quieres sacar esas dagas mortales de mi vida, siento como me desangro y me siento sola, muy sola.
Me haces mucha falta, he llorado y aunque jure no llamarte lo hice sin propósito... solo para escuchar tu voz.
No quiero levantarme de mi cama nunca, es como mi ataúd, porque yo creía que éramos una pareja.
Hoy estoy jugando sola a amarte, sin encontrar en ti la dicha del amor correspondido, has destrozado mi alma en mas de mil pedazos, hoy me encuentro viviendo no se como y tratando de sacarte de aquí adentro... no se como.
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