“He llegado a aceptar la sensación de no saber a dónde voy y me he preparado para que me guste. Porque es sólo cuando estamos suspendidos en el aire, sin saber dónde podemos aterrizar, que forzamos nuestras alas a abrirse y comenzamos por fin nuestro vuelo. Y mientras volamos, puede que todavía no sepamos hacia dónde nos dirigimos, pero el milagro está en el despliegue de las alas. Puede que no sepas a dónde vas, pero sabes que mientras extiendes tus alas, los vientos te llevarán.”
C. JoyBell C