José Luís Parrón Camacho.
"Hasta tu profundo suspiro
llegan vientos de mi garganta
es jadeante la armonía
con bravo desenfreno, ¡y sin pausa!
Hallo sabor de la impaciencia,
sonidos de tu piel me acarcian,
cuerpo y aromas de una mujer,
¡ ays, y siempre hasta a ti me arrastran!
¡Deseos!:
¡Qué se reflejan entre blancas sábanas!
Con el temblor de una promesa,
de una pasión que tuvo su principio:
¡en aquel éxtasis que nunca acaba!
La piel me erizas, ¡tú, mi bella dama!
Mi ser alcanzas,¡ tus pasión me llama!
Como carta de amor ,¡ perfume en la mañana!
Mis miradas de miedo, ¡reposan en tu espalda!
Tuve que sucumbir a tus dulces encantos
que eternamente me desarman ,
y, me rendí sin condiciones:
a tu hermosura en la batalla.
Si de amor es mi adiós,
que sea en tu almohada,
para llevarme hasta tu cielo :
¡la frescura de tu fragancia!"