EN LAS LÍNEAS DE MI ALMA
Había dormido lo suficiente, esa noche fue diferente
y el insomnio no apareció para hacerme compañía,
no hacía falta mirar la hora porque la música
de las aves comenzaba su ritual en el exterior
anunciando la aurora, pero no quería levantarme aún,
me negaba a hacerlo, daba vueltas y vueltas
entre las sábanas y la almohada evitando ver
la claridad que avanzaba por el vidrio de la ventana,
sabía lo que me esperaba en la agenda
al encender el móvil y la computadora saturados
de mensajes que debía atender, solicitudes
y comentarios en mi página personal que no
paraban de llegar.
-Poeta levántate, sal de la cama que tienes
que escribir como lo haces todos los días sabes
muy bien que hay lectores que esperan de la
savia de tu pluma tu inspiración.
-Pero tú no vuelves, no regresas para darme
esperanzas y sueños a mi corazón.
-Encadenada estoy a este sufrimiento y pago
mi condena en la distancia, dime para qué quieres
que vuelva si no puedes estar a mi lado.
-Me haces feliz y llenas mi alma de intensa pasión.
-Vacía me dejas cayendo sobre un precipicio
y se abren mis heridas al verte feliz en los brazos
de otra mujer.
El ruido desde afuera y en mi conciencia se hacía
cada vez más fuerte y dentro de mi corazón su amor
empujaba mi cuerpo de la cama porque ella vivía
en la fuerza de sus latidos en cada línea de mi alma.
Ángel de las Letras-
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