Milonga de dos hermanos
Traiga cuentos la guitarra
de cuando el fierro brillaba,
cuentos de truco y de taba,
de cuadreras y de coplas,
cuantos de la Costa Brava
y el Camino de las Tropas.
Venga una historia de ayer
que apreciarán los más lerdos;
el destino no hace acuerdos
y nadie se lo reproche,
ya estoy viendo que esta noche
vienen del Sur los recuerdos.
Velay, señores, la historia
de los hermanos Iberra,
hombres de amor y de guerra
y en peligro primeros,
la flor de los cuchilleros
y ahora los tapa la tierra.
Suelen al hombre perder
la soberbia y la codicia;
también el coraje envicia
a quien le da noche y día
el que era menor debía
más muertes a la justicia.
Cuando Juan Iberra vio
que el menor lo aventajaba,
la paciencia se le acaba
y le fue tendiendo un lazo.
Le dio muerte de un balazó,
allá por la Costa Brava.
Así de manera fiel
conté esta historia hasta el fin;
es la historia de Caín
que sigue matando a Abel.
Jorge Luis Borges
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