Valores 2
Tiempo atrás una profesora de filosofía dijo algo que me llamó
poderosamente la atención.
"Me molesta cuando alguien se lamenta diciendo que los valores
de nuestra sociedad se han perdido",
afirmó bastante airada, y añadió:
"esto es absurdo, porque nadie puede vivir sin valores".
Y seguí explicando:
"El problema no es la ausencia de valores,
sino los diferentes objetos en torno a
los cuales enfocamos nuestros valores".
Y entonces entendí que cuando una persona le es infiel a su cónyuge,
cuando un político cede ante la corrupción, en el momento en que
un joven prueba las drogas, el instante en el que alguien
se quita la vida, cuando los hijos ignoran a sus padres ancianos
y en tiempos en que muchos se dejan vencer por el consumismo,
podemos afirmar que los valores no se han perdido...
todo lo contrario: han sido reenfocados hacia el placer y la satisfacción personal.
Quienes lamentan la aparente pérdida de los valores,
intentan expresar su tristeza porque la fidelidad,
la integridad, la sana diversión, la religión, la vida,
la familia y el contentamiento, han dejado de ser motivos
por los cuales sacrificar los deseos personales,
y se ha reincidido (como humanidad) en la práctica del hedonismo.
Uno de mis autores favoritos, Ernesto Sabato, escribió:
"les pido que nos detengamos a pensar en la grandeza
a la que todavía podemos aspirar si nos atrevemos a
valorar la vida de otra manera [...] Hay algo que no falla
y es la convicción de que únicamente los valores del espíritu nos
pueden salvar de este terremoto que amenaza
la condición humana" (La Resistencia, Seix Barral, pp. 11-12).
El libro de Proverbios dice: "La sabiduría y el conocimiento
valen más que las piedras preciosas;
¡ni los tesoros más valiosos se les pueden comparar!
Aprende a tomar buenas decisiones y piensa bien lo que haces.
Hacerlo así te dará vida y los demás te admirarán.
Andarás por la vida sin problemas ni tropiezos.
Cuando te acuestes dormirás tranquilo y sin preocupaciones"
(Proverbios 3:15, 21-24, 35).
¿Y usted? ¿Qué toma en cuenta a la hora de establecer sus valores?
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