LA AMARGURA.

" Tu camino y tus obras te hicieron esto; esta es tu maldad, por lo cual la amargura penetrará hasta tu corazón.¨ vr.18.

Las experiencias en la vida, pueden ser para algunas llenas de dolor, de tristeza, y otras llenas de gozo y bienestar.

Las tristes y dolorosas pueden crear resentimientos y amarguras, que aprisionan la vida de una persona.

También, las relaciones quebrantadas con algún ser querido, algún familiar, o alguna amistad, trae consigo resentimientos que penetran el corazón.

El camino del hombre que busca por lo general, es un camino de pecado, alejado de Dios, con un corazón perverso.

¨Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino..¨ Isaías 53:6.

El alejamiento de Dios, acarrea amargura en el corazón del hombre.

La amargura entristece al Espíritu Santo y da lugar a Satanás en la vida: ¨Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de redención.¨ Efesios 4:30

Para salir de esa condición en la cual los sentimientos amargos han robado el gozo en el Señor, se necesita obediencia a la Palabra de Dios, en cada circunstancia de la vida y con toda persona que tiene su relación quebrantada.

¨Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados;¨ Hebreos 12:15.

Por último, la amargura es el resultado de vivir para agradarse a si mismo en vez de vivir para agradar a Dios, por lo tanto ¨Arrepiéntete,pues, de esta tu maldad, y ruega a Dios, si quizás te sea perdonado el pensamiento de tu corazón; porque en hiel de amargura y en prisión de maldad veo que estás.¨ Hechos 8:22,23.

¨Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia.

Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.¨ Efesios 4:31,32.

ORACION: Señor, te ruego que quites todo resentimiento que guarde en el corazón, para tener siempre el gozo en el Señor.

En su nombre, amén.