A Quién Amaré Más
Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe y fueron atormentados con muchos dolores.. 1 Timoteo 6:10
El modelo de economía consumista, que gracias al mundo globalizado penetró en nuestra hermosa sociedad, deja su tendal de injusticia, marginalidad y exclusión. Para que algunos estén bien, otros descienden en su nivel de vida cada vez más. Hemos oído frases como: “bajo el nivel de pobreza”, “reproducción de la marginalidad”, “desciende la edad en la iniciación del delito por el consumo de estupefacientes”; frases que leídas en el living cómodo de nuestra casa, no cobran mayor sentido.
La Biblia nos enseña, que por el amor al dinero que tuvieron algunos miles de extraviados, dejando la fe en Dios, el mundo se enfermó de dolores. Tenemos que aprender de una vez por todas que amar las cosas materiales nunca llenará el vacío de nuestro corazón. Si lo material es la prioridad de nuestra vida, seremos profundamente infelices. Esto no significa que no podemos tener lo necesario para vivir cómodos. Pero tengamos cuidado.
El dinero es un medio para lograr los planes que el Señor puso en nuestro corazón, no es la meta a la que debemos llegar. Si tenemos lo que necesitamos no pensemos que aun falta más, porque el enemigo nos empujará hasta perder la santidad en búsqueda de cosas que se esfumarán entre nuestras manos.
Oración: Señor, perdón por ser tan materialista, enséñame a vivir en sencillez. Tu presencia es todo lo que necesito.
Marta Yurquina de Biondi