Dios mío, toma mi mano,
no dejes que me hunda en el fango,
y llévame siempre por el camino que has marcado,
porque a veces veo unas hermosas nubes blancas,
pero son nubes de negro polvo de pecado.
Por favor mi Dios, no me sueltes de mi mano,
porque hay muchos que engañan
con los hermosos sueños, a cambio de nuestras almas,
por eso elevo mis oraciones a tu presencia,
para que siempre este protegido por tu armadura.
Señor, nunca, nunca, te apartes de mi lado,
porque yo no quiero riquezas ni fama,
porque lo único que quiero es conocer
el paraíso que nos as prometido,
y vivir contigo que me lleves de mi mano,
y que no pueda caer entre el fango podrido del pecado.
Aliciapd
Autor: Mauricio " Maury " Olivares.
Aporte de: Mauricio " Maury "