Recuerdo una vez de tantas, estando en la playa
desde la mañana conviviendo con la familia
y todo era tan tranquilo se sentía una paz,
una felicidad placentera y de pronto me
puse a observar todo, veía a la gente,
las palmeras, la arena, las gaviotas,
pero cuando vi el inmenso mar viendo
las olas ir y venir me di cuenta de
que la vida está llena de todo.
De logros, fracasos, felicidad, tristeza y
me di cuenta que sólo hay que ser fuerte
para superar los golpes de la vida.
Vive, disfruta y no tomes las cosas tan en serio
vive cada día como si fuera el último,
porque nosotros nos vamos y ya
no volvemos como las olas del mar.