Falta poco más de un mes para meternos de lleno las Navidades. Los buzones se llenan de revistas de jugueterías y los más pequeños ya empiezan a hacer su lista. Como lo de pensar en consumir, ahora, no me seduce mucho, hemos preferido centrar nuestra atención en los adornos navideños. Iremos haciendo cositas poquito a poco. Ésta es la primera propuesta:
La estrella de Navidad es un adorno que no puede faltar. Tanto si sois de poner belén como si sois de árbol. Y si ponéis las dos cosas con más motivo!
Esta estrella la hemos realizado en lana y tan solo hemos necesitado una bandeja de poliestireno (las que traen alimentos en el supermercado) palillos de madera, cola blanca (mezclada con agua a partes iguales) y la plantilla de la estrella que previamente habremos dibujado y recortado en papel. Mirad qué fácil!
Marcamos las aristas de la estrella y vamos pasando la lana por dentro y por fuera. Luego rellenamos haciendo círculos y presionamos con los dedos para que quede plana. No os olvidéis de quitar la plantilla después de poner el último palillo que será al que habremos anudado la lana.
Como no teníamos vaselina, que es lo que se suele poner para que no se pegue el trabajo al molde, pusimos una gotita hidratante corporal.
Ah! Debéis retirar los palillos con cuidado antes de que seque del todo. Quizás si se untan también con crema o vaselina no haga falta, pero no os lo aseguro.
Como veis, con esta técnica se pueden realizar más adornos navideños. Si queremos hacer campanas, corazones, o algo que lleve parte curva, deberemos completar la línea con palillos uno al lado del otro bien juntos.
¿Os ha gustado? Pues atentos, que en breve habrá más!