Ex braceros reiteran demandas por recursos retenidos

Anarquistas y ancianos movilizan a las policías

Bush, PFP y el Puebla-Panamá, "blancos" de los jóvenes

GEORGINA SALDIERNA Y JOSE DIAZ BETANCOURT ENVIADA Y CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 26 de mayo. Los policías antimotines de Guadalajara hicieron su presentación la tarde de este miércoles con amplio número de agentes para controlar a medio centenar de jóvenes -casi adolescentes- que se denominaron "anarquistas" y contra un grupo de adultos mayores, ex braceros de los años cincuenta y sesenta, primeros contingentes que se presentaron en las inmediaciones de la sede de la tercera cumbre de América Latina y el Caribe-Unión Europea.

El grupo de ex trabajadores es el mismo que ingresó al rancho de la familia del presidente Vicente Fox hace unos meses, en Guanajuato, en reclamo de sus fondos de seguridad social retenidos por el gobierno federal desde hace décadas.

Los jóvenes, por su parte, irrumpieron en el Centro Metropolitano por la avenida 16 de Septiembre, pero se encontraron con una fuerza de 300 policías que los hicieron huir a lo largo de la avenida Juárez, donde gritaron sus consignas. Después de intentar ingresar a la plaza de armas de esta ciudad, fueron materialmente "pastoreados" por numerosas patrullas, policías de a pie y camiones repletos de uniformados.

El grupo de los anarquistas fue custodiado por numerosos agentes de seguridad encabezados por el secretario del ramo en el estado, Alfonso Gutiérrez Santillán, y el llamado diputado maquinitas, funcionario que se encarga de la seguridad interior del gobierno. Su nombre es Leobardo Treviño, zar local de los videojuegos que operan en tiendas de abarrotes. Extenuados por la larga caminata, ambos funcionarios traían el rostro desencajado por no haber podido negociar y evitar las marchas.

Los jóvenes no quisieron dar entrevistas e insultaron a la Policía Federal Preventiva, la cumbre y al presidente de Estados Unidos, George W. Bush; también condenaron el Plan Puebla-Panamá. Cuando estaban a varios kilómetros del centro de Guadalajara, la vigilancia cedió.

Por otra parte, la marcha de ex braceros avanzó desde el sindicato de telefonistas, en el norte de la ciudad, pero sólo caminó unos cuantos kilómetros antes de ser interceptada por la policía.

La marcha, a la que se sumó un pequeño contingente de comerciantes ambulantes inconformes por haber sido desalojados del centro, comenzó en el parque de la Revolución y fue encabezada por el ex diputado Gilberto Parra.

Antes los ancianos celebraron una reunión en el local de la sección 2 del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana y de ahí partieron en camiones hasta el sitio donde iniciaron su marcha, que incluyó cuatro caballos, mientras personal de vialidad, antimotines y policías los custodiaban. Parra dijo que sólo pretendían llegar hasta la plaza Guadalajara (frente al ayuntamiento) para un mitin.