Un acuerdo, alcanzado entre la Compañía Estatal Petróleos
de Venezuela (PDVSA) y los ediles del Frente Sandinista de Liberación Nacional
(FSLN), establece que el suministro a Nicaragua sea dirigido a través de la
alcaldía de Managua, precisó la fuente.

Marenco destacó que este convenio es una muestra de solidaridad
de la Revolución Bolivariana con el pueblo nicaragüense, que atraviesa una
difícil situación por el aumento desmesurado del precio del petróleo en el
mercado internacional

En este proyecto, la alcaldía capitalina invirtió unos 60
mil dólares y se espera el aporte del resto de las 87 entidades edilicias
sandinistas para crear una empresa mixta, conformada en conjunto con la
Asociación de Municipios de Nicaragua (AMUNIC).

En ella participará también PDVSA y la Empresa
Nicaragüense de Petróleo (PETRONIC), encargada de distribuir el combustible en
el país.

El alcalde capitalino dijo esperar que los primeros en
beneficiarse con este suministro a precio diferenciado sea el transporte
colectivo, incluyendo los taxis.

Advirtió que el 40 por ciento del costo total del barril de
petróleo será financiado por la compañía venezolana, por lo que el combustible
con ese descuento será adquirido a precio preferencial y ello permitirá a las
alcaldìas utilizar fondos para obras sociales.

De acuerdo con los expertos los suministros llegarán de
Venezuela por los puertos de Corinto o Sandino, en la región del
Pacífico.

El secretario general del FSLN, Daniel Ortega, propuso que
la empresa creada por los alcaldes y PDVSA se llame "ALBA", en reconocimiento a
la Alternativa Bolivariana para las Américas promovida por el presidente
venezolano Hugo Chávez.

Subrayó el líder del mayor partido de oposición que este
convenio es parte de la integración y de la unidad de los pueblos en lucha
contra el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que pretende imponer
Washington "para extender su dominio imperial".

Dijo que Venezuela es el primer país en ofrecer su petróleo para
contribuir al desarrollo de los demás pueblos latinoamericanos, mientras los
gobernantes norteamericanos gastan millones de dólares en promover
guerras.

En esta ocasión el presidente nicaragüense, Enrique
Bolaños, quedó al margen de la solución de uno de los mayores problemas de este
país al no encontrar soluciones para aliviar el incremento incontrolable del
costo del petróleo en el mercado internacional, comentó Ortega.

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