En la antigua Roma, cuando sucedía un hecho confuso
o un crimen misterioso, los juristas se hacían una pregunta: '¿Quid
prodest?'. Es decir, ¿a quién beneficia? En muchos casos, la historia ha
suministrado las respuestas.
1. El 25 de enero de 1898, el
acorazado estadounidense Maine llega a La Habana en visita 'de paz y
amistad'. En realidad, el cónsul de Estados Unidos ha solicitado el envío
de un buque para 'garantizar la seguridad' de los norteamericanos en la
isla. En la noche del 15 de febrero una explosión hunde el barco y causa
la muerte de dos oficiales, 28 marines y 230 marineros. Al día siguiente,
The New York Journal informa que el buque fue hundido deliberadamente.
Bajo la consigna '¡Recordad el Maine!', Estados Unidos declara la guerra a
España e invade Cuba.
En 1911 se decide reflotar el acorazado. Una
comisión estadounidense examina los restos y reafirma la hipótesis de la
causa externa. Pero en 1976, el almirante Hyman Rickover elabora un nuevo
estudio con los datos recabados en 1898 y 1911, y concluye que la causa de
la explosión fue el calor producido por el fuego de una caldera próxima al
arsenal. No vale la pena preguntar a quién benefició el hundimiento del
Maine.
2. En la noche del 27 de febrero de 1933, en Berlín, se
incendia el Reichstag, sede del parlamento alemán. La policía encuentra a
un enfermo mental, Marinus van der Lubbe, medio desnudo, detrás del
edificio. Van der Lubbe es un ex comunista holandés y albañil desempleado.
El canciller Adolf Hitler declara que el fuego ha sido causado por los
bolcheviques, impone el estado de emergencia y convence al anciano
presidente Paul von Hindenburg para abolir la mayoría de las disposiciones
de derechos civiles de la Constitución de 1919 de la decadente República
de Weimar.
En las elecciones de marzo de ese año, los nazis
consiguen 17 millones de votos; aunque tienen el 44 por ciento los votos,
no logran la mayoría absoluta en el Reichstag. Pero mediante un decreto
presidencial, Hitler declara fuera de la ley al Partido Comunista. Para el
21 de marzo ya cuenta con el control total en el Parlamento. Después se
van disolviendo los otros partidos y en julio Alemania es un país
monopartidista. A principios de 1935, el ex cabo austriaco dispone de un
poder ilimitado. Es ocioso preguntar a quién benefició el incendio del
Reichstag.
3. El primero de agosto 1964, el destructor
estadounidense USS Madox navega en aguas del Golfo de Tonkín, en Vietnam
del Norte. El 3, la nave detecta en su radar lo que califica de 'un ataque
de cuatro lanchas patrulleras vietnamitas' y pide auxilio por radio. El
presidente Lyndon B. Johnson convoca al Congreso el 7 de agosto y solicita
apoyo total para una intervención más directa de Estados Unidos. Logra la
autorización para incrementar los bombardeos aéreos sobre el norte y
aumentar las tropas norteamericanas en la guerra. Posteriormente se
realiza una investigación del incidente y se llega a la conclusión de que
no hubo ataque, sino que fue un error del operador del radar.
En
abril de 1999, la Biblioteca Lyndon B. Johnson hace públicas las
transcripciones de grabaciones telefónicas entre Johnson y el secretario
de Defensa, Robert McNamara. Queda claro que los dos engañaron al Congreso
y ocultaron operaciones secretas con intenciones de provocación en el
golfo de Tonkín. ¿A quién sirvió el incidente?
4. El lunes 19 de
septiembre, dos soldados ingleses vestidos como árabes, con barba,
documentos falsos y explosivos ocultos en un vehículo civil, fueron
detenidos por la policía iraquí en Basora, 450 kilómetros al sur de
Bagdad. Poco después, tropas británicas apoyadas con tanques y
helicópteros demolieron una pared de la cárcel donde se creía que estaban
presos. En realidad, se hallaban en una casa de seguridad y fueron
rescatados el mismo día.
Un vocero del ministerio del Interior
iraquí explicó a la prensa que los dos soldados planeaban actos
terroristas con la finalidad de desencadenar una guerra entre distintas
comunidades religiosas. El objetivo -afirmó- era hacer explotar bombas en
lugares sagrados para los fieles de la rama chiíta y culpar los sunitas.
Quizá exageraba. Es posible que inocentes muchachos disfrutaran de un día
libre y hayan decidido salir a cazar
conejos. |