Medios oficiales en Cuba y
Venezuela rechazaron con vigor la decisión de un juez norteamericano
de inmigración en El Paso, Texas, de no permitir la deportación a
Caracas del terrorista Luis Posada Carriles para ser juzgado allí
por cruentos crímenes, entre estos la destrucción con bombas de un
avión civil cubano en pleno vuelo en 1976 con un saldo de 73
muertes.
El diario oficial cubano GRANMA público este
miércoles el titular 'Infamante decisión judicial: Posada al abrigo
del imperio'. En el comentario se señaló que 'según divulgaron
medios en Miami , |
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Abbott informó por
escrito que Posada, acusado de planear la voladura de un avión donde
murieron 73 personas en 1976, pudiera ser torturado en esos países
(Cuba y Venezuela) , y que bajo la Convención de Naciones Unidas
contra la Tortura no debe ser extraditado'.
'Con esa decisión
infamante, la justicia de Estados Unidos demostró el doble rasero de
su política al negar la extradición del terrorista Posada Carriles a
Venezuela', expuso el rotativo, que es órgano del gobernante Partido
Comunista de Cuba.
'La decisión no descarta que el reo sea
enviado a otro país, lo que permitiría a Washington salir de un
huésped indeseable en momentos en que la Casa Blanca se declara
abanderada de la lucha contra el terrorismo', comentó el
diario.
El artículo citó a José Pertierra, jurista en Estados
Unidos especializado en asuntos migratorios y que representan a las
autoridades venezolanas en el caso, quien subrayó que 'esta es una
crónica de un acuerdo anunciado, desde el día en que Luis Posada
decidió viajar a Estados Unidos'. Agregó que todo comenzó 'cuando
agentes del FBI (Buró Federal norteamericano de Investigaciones) lo
escoltaron de Panamá a Honduras, y siguió cuando estuvo sin ser
detenido varias semanas en Miami. Continuó con el trato preferencial
del Departamento de Seguridad de la Patria, que lo transportó en un
carrito de golf, y así hasta el día de hoy'.
No obstante,
Pertierra aclaró que 'lo de Abbott no es una decisión que invalida
el pedido de extradición del terrorista realizado por el Gobierno de
Venezuela, porque el trámite de inmigración es paralelo e
independiente del proceso de extradición. Es más, el proceso de
extradición tiene prioridad ante el trámite de inmigración',
puntualizó.
De acuerdo con reportes desde El Paso, donde se
sometió al terrorista anticubano a un proceso, el juez del caso
concedió al gobierno federal estadounidense un plazo de 90 días para
encontrar un tercer país dispuesto a recibir al individuo. La
Fiscalía tiene un mes para apelar la decisión de
Abbott.
'Hasta que no venzan los 30 días, el dictamen de
Abbott no es una decisión final, salvo que la Fiscalía decida no
apelar y lo declare, cosa que dudo mucho', opinó el jurista
Pertierra.
'Hay dos peligros en estos momentos, que el
Gobierno de Estados Unidos lo envíe a un tercer país durante los
próximos 90 días, para evadir su extradición a Venezuela; o que
Estados Unidos declare que no pretende deportarlo y le conceda la
libertad bajo palabra, como hizo con el compinche de Posada, Orlando
Bosch.', manifestó.
En la capital venezolana, la viceministra
para América del Norte, María del Pilar Hernández, dijo que en el
juicio que se le ha seguido a Posada Carriles -nacido en Cuba y
nacionalizado venezolano- en El Paso, Texas, ha prevalecido una
actitud oficial estadounidense complaciente.
'¿De donde la
sacaron (la decisión de Abbott) y dónde están las pruebas que la
avalen, cuando por el contrario la Constitución venezolana prohíbe
la tortura y cualquier tipo de vejámenes físicos y/o sicológicos?',
puntualizó la vicecanciller, quien defendió el derecho de Venezuela
a juzgar al terrorista.
'Resulta sorprendente cómo a Posada,
un terrorista confeso, se le juzga en el país norteamericano porque
entró en forma irregular a su territorio y se obvia el homicidio en
primer grado de las 73 personas que iban a bordo del avión cubano
que explotó en pleno vuelo con la bomba que mando a colocar aquél',
denunció Hernández.
Reiteró que la demanda de extradición
sobre Carriles hecha por Venezuela se basa en un Tratado de
Extradición con Estados Unidos firmado el 19 de enero de 1922, en la
Convención Internacional de Aviación Civil, firmada en Montreal,
Canadá, el 23 de septiembre de 197, y la Convención Internacional
para la Supresión de Ataques Terroristas, suscrita el 15 de
diciembre de 1997.
En un dictamen de siete páginas divulgado
el martes, el juez Abbott reconoció que 'de hecho, no existe un
estatuto que prohíba la postergación de deportación de acuerdo con
la ley vigente''.
En un intento de justificar su decisión,
escribió que 'el más odiado terrorista o genocida calificaría para
una postergación de deportación si es capaz de mostrar pruebas
suficientes acerca de la probabilidad de tortura en el futuro. Esta
es nuestra posición colectiva como nación, que nadie, no importa
cuál sea su pasado, será deportado a un país donde exista una clara
probabilidad de tortura''.
El mismo martes, los abogados del
terrorista dijeron que tienen el proyecto de solicitar su liberación
'por motivos humanitarios' lo cual, en opinión de expertos, cerraría
el círculo de una maniobra de protección en torno a Carriles, quien
fue agente de la Agencia Central de Inteligencia, en la cual se
adiestró para llevar a cabo violentos ataques principalmente contra
Cuba. |
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